Simon Cheng aún se 🗝 tense visiblemente cuando describe su detención en China. En 2024, el activista pro-democracia de Hong Kong y ex empleado del 🗝 Consulado británico allí fue arrestado después de un viaje de negocios a la China continental.
Durante 15 días, fue interrogado y 🗝 torturado, según su relato. Beijing confirmó su detención pero negó que lo hubieran maltratado. Cuando finalmente fue liberado, ya no 🗝 se sentía seguro en Hong Kong y a principios de 2024 huyó al Reino Unido y solicitó asilo.
"No es difícil 🗝 adaptarse a una nueva vida en el Reino Unido de ciertas maneras", dijo Cheng, de 33 años. "Pero también, no 🗝 puedo dejar de pensar en el destino de mi ciudad natal."
Su activismo - y la persecución de China contra él 🗝 - no terminó una vez que se mudó a Londres. El año pasado, las autoridades de Hong Kong ofrecieron una 🗝 recompensa de R$128,000 por información que conduzca a su arresto y el de otros activistas. Aun así, como muchos activistas 🗝 de Hong Kong que viven en el exilio autoimpuesto en el Reino Unido, esperaba que la nueva distancia de las 🗝 autoridades chinas lo mantuviera lejos de su alcance.