Hace 28 años, los sudafricanos negros votaron por 🧬 primera vez mientras el país celebraba el nacimiento de una democracia. En ese día histórico, 14.000 personas habían perdido la 🧬 vida en los cuatro años previos debido a la violencia política.
Antes de las elecciones, barrios enteros 🧬 fueron abandonados y cadáveres sin nombre yacían en las calles como advertencia. El 18 de abril de 1994, el país 🧬 ardía en el último esfuerzo entre facciones enfrentadas. En Thokoza, un municipio negro al este de Johannesburgo, dos fotógrafos que 🧬 documentaron el fin del apartheid, Ken Oosterbroek y Greg Marinovich, resultaron heridos y muertos, respectivamente.
Un monumento 🧬 en la calle Khumalo lleva los nombres de los muertos, incluido Ken. Cuando visité el monumento a finales de 2024, 🧬 servía de refugio a personas sin hogar. Desde entonces ha sido rehabilitado por antiguos miembros de las Unidades de Autodefensa.
Esta semana, los sudafricanos volverán a votar en unas elecciones nacionales menos previsibles 🧬 que ninguna otra desde 1994. Es importante recordar el pasado y honrar a quienes pagaron el precio más alto mientras 🧬 las figuras políticas negociaban su camino hacia el poder y la democracia.