La decisión de la administración Biden de permitir que Ucrania 📉 ataque dentro de Rusia con armas estadounidenses cumple un deseo largamente sostenido por los funcionarios de Kiev que afirmaron que 📉 era esencial para nivelar el campo de juego.
El cambio de política se produjo después de que nearly una docena de 📉 gobiernos europeos y Canadá declararan que sus armas podrían usarse para disparar en Rusia.
Liberados de esas 📉 restricciones, Ucrania puede atacar a Rusia con misiles SCALP de Francia y, potencialmente pronto, los misiles Storm Shadow suministrados por 📉 Gran Bretaña. Aunque el ministro de Relaciones Exteriores británico, David Cameron, dijo el 3 de mayo que Ucrania debería poder 📉 atacar a Rusia con armas occidentales, Londres aún no ha dado su plena autorización, según el presidente Volodymyr Zelensky de 📉 Ucrania en una entrevista publicada el viernes en The Guardian.
Los misiles SCALP y Storm Shadow tienen un alcance de alrededor 📉 de 150 millas y se disparan desde la flota de cazas soviéticos anticuados de Ucrania.
Varios 📉 países - Gran Bretaña, Alemania, Noruega y los Estados Unidos - han entregado a Ucrania lanzadores terrestres que pueden lanzar 📉 misiles de más largo alcance. Estos sistemas se conocen como lanzadores HIMARS y MLRS y también pueden disparar los misiles 📉 tácticos del ejército estadounidense ATACMS, que tienen un alcance de hasta 190 millas.
Sin embargo, al revelar la nueva política, los 📉 funcionarios estadounidenses dijeron que su política no permitiría el uso de ATACMS o misiles de largo alcance que puedan alcanzar 📉 profundamente Rusia. Alemania también se ha negado hasta ahora a donar su misil Taurus, con un alcance de 310 millas, 📉 en parte por la preocupación de que pueda ser lanzado profundamente en Rusia y escalar la guerra.